Internacionalismo
Vietnam recuerda a víctimas de la matanza de Son My
El aniversario 48 de la masacre Son My (My Lai) que conmocionó a todos los amantes de la paz en el mundo tuvo lugar hoy en las ruinas de esa localidad en la provincia centrovietnamita de Quang Ngai.
Centenares de pobladores junto a autoridades locales y representantes de la organización estadounidense Madison Quakers, asistieron al acto conmemorativo.
Los participaron colocaron inciensos en el Monumento de Testimonio de Son My para homenajear a las 504 víctimas mortales de la también conocida como matanza Pinkville, una de las páginas más trágicas del pueblo vietnamita en su lucha por la independencia y reunificación nacional.
Billy Kelly, un veterano estadounidense, ofreció ante el monumento una ofrenda de floral compuesta por 504 rosas, igual número de víctimas de la masacre, mientras que Mike Boehm, representante de Madison Quakers, tocó su viejo violín, como homenaje a los inocentes que perdieron la vida en esa tragedia.
Las melodías también transmiten el mensaje de paz de Son My al mundo.
El 16 de marzo de 1968, soldados norteamericanos asesinaron en una operación de barrida a 504 civiles desarmados, que en su mayoría eran mujeres y niños, en la aldea de Son My (o My Lai), en la comuna de Tinh Khe, distrito Son Tinh, en Quang Ngai.
Bajo el concepto “quemar todo, matar todo”, también destruyeron 247 viviendas de la población local, masacraron miles de reses y aves de corral, y quemaron todo el arrozal en espera de cosecha.
La sangrienta matanza sacudió a todo el mundo, mostró la crueldad de los invasores estadounidenses durante la guerra en Vietnam y dejó enormes pérdidas espirituales a familias de las víctimas y el pueblo vietnamita.
Ese genocidio no fue el único cometido por las tropas de Washington, aunque por su magnitud y atrocidad resultó el más condenado en Estados Unidos y el mundo.
El criminal hecho espoleó aún más el movimiento antibelicista en EE.UU., cuyo gobierno, avergonzado por la opinión pública mundial y derrotado por el Ejército Popular de Vietnam, no tuvo más remedio que retirar sus tropas en enero 1973.